La psicomotricidad es una disciplina que entiende al ser humano como un ser global e indiferenciado, abarcando la esfera psíquica, física, social y cognitiva. A través de nuestro movimiento y nuestro lenguaje no verbal, nos relacionamos con los demás y con el entorno que nos rodea, expresamos nuestras emociones y transmitimos muchos aspectos de nuestra personalidad. La psicomotricidad estudiará el vínculo de la psique y la corporalidad, dándonos información sobre las necesidades de esa persona en cada momento o etapa evolutiva.
El psicomotricista, acompaña y ayuda al niño a través del movimiento corporal favoreciendo su desarrollo evolutivo y, en otros casos, su recuperación.
Como beneficios de esta terapia encontramos:
- Mejora la integración social del niño.
- Aumenta y/o refuerza su seguridad emocional y afectivo-relacional.
- Ayuda a conocer límites y capacidades.
- Refuerza su control postural, su equilibrio, su lateralidad, coordinación, etc.
- Descarga tensiones y ayuda a liberar estrés.
- Mejora autoestima y reafirma nuestro autoconcepto.
- La percepción y discriminación de las cualidades de los objetos y sus distintas utilizaciones.
- Se prepara capacidades necesarias para los aprendizajes escolares básicos
En resumen, la práctica de la psicomotricidad nos permite estimular el área motora, cognitiva y social y afectiva. En Munay entendemos la psicomotricidad desde un enfoque afectivo-cognitivo. Creemos que el abordaje del niño debe tener un trato especial y personalizado atendiendo a sus necesidades en cada etapa del desarrollo.